Los alcaldes de 12 municipios dominicanos y haitianos acordaron abocarse al diseño y ejecución de un proyecto para la instalación de los mercados binacionales sobre la misma franja fronteriza, y así sacarlos de las zonas urbanas.
El tema fue abordado en la última reunión del Comité Intermunicipal Transfronterizo, celebrada los días 28 y 29 de enero en Elías Piña, y en el que participaron los alcaldes dominicanos de Hondo Valle, Juan Santiago, El Llano, Comendador, Pedro Santana y Bánica, y los haitianos de Savannete, Belladere, Thomazique, Cerca la Source y Las Caobas.
“Como tu sabes hasta el momento estos mercados han funcionado en ciudades dominicanas, lo cual arrastra muchos problemas que van desde el cierre de éstos, como por ejemplo ahora ante el problema del cólera y los abusos que cometen funcionarios civiles y militares sobre los comerciantes haitianos”, explicó Haroldo Dilla, coordinador del grupo Ciudades y Fronteras.
Para el sociólogo, la solución más expedita encontrada por las autoridades municipales de los municipios fronterizos al problema urbano generado por los mercados, es instalarlos sobre el mismo borde (tierra de nadie), de manera tal que los ciudadanos de un país no tengan que cruzar hacia el otro.
Ése y otros proyectos debatidos por los alcaldes fronterizos dominicanos y haitianos serán presentados a los organismos de cooperación internacional para procurar financiamiento, conforme a las explicaciones de Dilla.
Se planteó conformar una alianza de las organizaciones de la sociedad civil para acompañar, críticamente, la gestión de los municipios, pertenecientes a la provincia Elías Piña, del lado dominicano y el Departamento Central, del haitiano.
Se ha logrado trazar políticas conjuntas, acciones de desarrollo que benefician ambas partes. “Por ejemplo, el acceso de los haitianos a los mercados es muy difícil debido a la situación grave de los caminos; hay que invertir en eso”, explicó.
Define como muy importante el hecho de que se haya logrado un mejor manejo en materia de medio ambiente, sometiendo a revisión, con ayuda internacional, de áreas “sensibles”, lográndose habilitar algunas que estaban en un proceso de “decadencia ambiental”.
“En momentos en los cuales la Comisión Mixta Bilateral no termina de despegar, realmente el único espacio de interacción y cooperación estatal entre República Dominicana y Haití, es éste que está funcionando en la frontera, a nivel local”, comentó Dilla en conversación 7dias.com.do.
A su entender, en estas tareas ha sido vital el apoyo de la Dirección General de Desarrollo Fronterizo del lado dominicano y la Comisión de Desarrollo Fronterizo del haitiano, pero sobretodo, la cooperación de Francia y Canadá, la Fundación Friedrich Ebert y el Fondo de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
“Ahora mismo hay un intenso trabajo entre los alcaldes de Pedro Santana y de Cerca la Source, así como la FUNDASEP y la Dirección de Desarrollo Fronterizo para la rehabilitación de la Carretera Internacional, que comunica a Dajabón, en el norte, con Elías Piña, en el sur”, señaló.
Consideró vital dicha carretera, porque es la única forma de que los comerciantes del Cibao, región de mayor dinamismo económico, puedan llegar al sur y viceversa.
En el censo del 2003 la población en los seis municipios dominicanos mencionados había una población de alrededor de 60 mil personas, cantidad que iba en descenso debido a un proceso migratorio acelerado.
“Justamente, de lo que se trata, entre otras cosas, es ver cómo se logra una mejoría en el nivel de vida de la gene, dignificar la vida de las personas, y cuando se haga las personas van a emigrar menos”, terminó diciendo Dilla.
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